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Almas grises (Les Ames grises)

De cierto modo, el lector tras encaminarse en el juego de las ideas y las palabras en un libro, trata con simple simulacro crearse sus propias expectativas, se torna algo subversivo en sus pretensiones, hasta el punto de aportar algún vestigio de luz, y más el gris del libro que nos toca tratar. Ser un crítico, por lo general, consiste en celebrar lo sublime con la ilusión de replantear la estética, construyendo desmesuradamente el sentido distintivo del escritor con su texto.
2003 fue el año otorgado por el Premio Renaudot y por la Revista Lire como la Mejor Novela del año al escritor Philipe Claudel y a su novela corta Almas Grises. Técnicamente es una novela narrada en primera persona, quien tras un suceso ocurrido veinte años atrás en una pequeña ciudad francesa, V y en pleno escenario de la primera guerra mundial, aparece estrangulada una niña de diez años. Este hecho degenero en un caldo de intranquilidad en toda la comunidad. Bell de Jour, la hija menor de unos de los vecinos de la ciudad, define la necesidad, sin importar los estruendos de las bombas y la carnicería humana producto de la misma guerra, la materia en que girara la historia.
“No sé muy bien por dónde empezar. Es realmente difícil. Todo ese tiempo ido, que las palabras no harán volver jamás, y también los rostros, las sonrisas, las heridas…. Pero aun así debo intentar decirlo. Decir lo que me roe el corazón desde hace veinte años
En el ámbito de las manifestaciones contadas, vemos la muerte germinar con un aura que procurar vencer los recuerdos que podrían revitalizar las escenas que le resultan difíciles de detallar a esa persona que se encuentran detrás del texto. Perderse en la argumentación de hechos recordados, no es una tarea difícil, como lo declara en su ahondar proceso de recordar. Philipe Claudel con este texto procurar atrapar al lector, quien lo hace sagazmente, bajo una estructura de prosa elegante en su sobriedad. Otros elementos que podemos apreciar son los escenarios y personajes que va describiendo Claudel en su libro, la maldad y la hipocresía nos lleva a un estado de reflexión.
En términos generales, aunque la argumentación, o podríamos decir, el guion de esta novela es aceptable, más que ver una historia policiaca, es una novela de tonalidades grises, de personajes y cuadros delineados por soledades. Trata críticamente la sociedad, sobre todo las altas esferas de la sociedad, que en dadas ocasiones se alinean y confabulan desligándose de los crímenes cometidos a la humanidad, siempre buscan una conejillo de india, como así aconteció en la novela, todo el peso cayó sobre dos.
El resto es de ustedes.

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