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¿Dónde está Dios? El problema del sufrimiento humano

La afinidad con la cual dicho escritor aborda el tema del sufrimiento, hace que su enfoque sobre dicho tema sea visto como un proyecto del agnosticismo. En reiteradas ocasiones, no deja a la sombra cual es su modelo de pensamiento para tratar el tema. El escrito es una respuesta a las tantas interrogaciones que se formula el hombre, y sobre todo, las cuestiones que en esos relámpagos que le ofrece el pensar de sus alumnos al impartir clase en la universidad, se propone a darle respuestas a aquellos docentes ávidos de saber el umbral mismo del sufrimiento, respuestas las cuales en ocasiones se la proporciona, pero que en desarrollo mismo, se ve desarmado al no tener la respuesta como en las matemáticas el por qué dicho sufrimiento, ya que por lo general, sus alumnos siempre buscan la respuesta a la determiniacion del libre alberdrio, pero mas luego, el responde con una pregunta, y los fenómenos naturales, cuál sería la suelta dicho acontecimientos.

A tomar el escrito, me propuse a ver algo diferente, claro sin dejar a un lado los meritos que tiene dicho escritor. Hace un planteamieto sobre la teodicea propuesta por Leibniz uno de los grandes intelectuales y eruditos del siglo XVII, donde traza en un extenso ensayo una reconcilicion de la existencia de Dios con la presencia del mal en el mundo, donde acento en claro que no es mas bien que una justificacion del mal, imbuyendo un modelo necesario, para dejar absuelto y redimido a Dios. La teodicea, fue utilizado como título de una de sus obras: «Ensayo de Teodicea. Acerca de la bondad de Dios, la libertad del hombre y el origen del mal» Cabe enfatizar, que este termino en la actualidad ha sido suplantado por lo que llaman teología natural o teología racional. “Los filosofos y teologos que han discutido el problema de la teodicea a lo largo de los años ha ideado una especie de problema lógico que es necesario resolver para explicar el hecho de que exista sufrimiento en el mundo. El problema implica tres afirmaciones que parecen todas ser ciertas, pero que, al mismo tiempo, parecen contradecirse entre sí. Esas afirmaciones son las siguientes:

  1. Dios es todopodero.
  2. Dios es completamente bueno.
  3. El sufrimiento existe.
A estas tres afirmaciones, nuestro escritor asienta algunos cuestionamientos que son necesarios desarrollar. Discusiones que van a la pura determinación de Dios en cuanto a ser todopoderoso, en su condición de eliminar todo sufrimiento del mundo, siendo este al autor de todo lo creado. David Hume: “Las viejas preguntas de Epicuro continuan sin tener respuestas: ¿Quieres Dios evitar el mal pero no puede? Entonces es impotente. ¿Puede, pero no quiere? Entonces es malevelo. ¿Si puede y quiere? Entonces, ¿por qué existe el mal?

Otros temas se encuentran diseminados por todo el libro. Temas sobre el planteamiento del mal y el sufrimiento a partir de los escritos del pentateuco, históricos y proféticos. Hace un tratamiento especial al caso más notable en cuanto a sufrimiento que le haya pasado a una persona, como es el caso de la vívida historia de Job, de cómo Job viéndose como un títere en las manos de dos seres sobrenaturales juegan a quien servir “Los hombres, en general, no son sino marionetas maltratadas por un titiritero”, Dios deja a la suelte de Satan realiza todo los males habidos y por haber en la vida de este hombre. Es decir, ¿tiene sentido el sufrimiento?, atendiendo a lo planteado por los libros de Job y Eclesiastes.

Un tema especial son las concepciones apocalípticas del sufrimiento, es decir, el apocalipticismo judeocristiano, donde desarrolla los antecedentes del pensamiento apocalíptico. Navega por la visión nocturna de Daniel y su interpretación. Deja en claro cuales son las creencias fundamentales del apocalipticismo, donde tiene como base: El dualismo, el pesimismo, la vindicación y la inmanencia. Jesús como profeta apocalíptico, Pablo y las epistolas que abordan el sufrimiento, el apocalipsis de Juan, todo estos son temas finales de su libro.

El noveno capítulo, que es la conclusión, deja en claro cual es su ultima razón para explicar la presencia del sufrimiento en el mundo, que a diario nos fulmina, física y psicológicamente, donde los diarios, la televisión, los medios electrónicos son la cara cruel de como la pasan millones de personas, ya sean, con la presencia de terremotos, ciclones, sunamis, las olas del terrorismo, la muerte de cientos y cientos de soldados, donde la guerra no es de ellos, las muertes de millones de niños por falta de alimentación, la muerte de millones de personas por enfermedades, la poca asistencia de los gobiernos en el rescate del sistema de salud, entre otras advertencias del inhumano rostro del sufrimiento que se ve plasmado en un niño. “He aquí otra escena que me impresionó. Fijate en ella, aun en el pecho de su madre temblorosa, y alrededor de ella los turcos. Se les ocurre una broma: acariciando el bebe consiguen hacerlo reir, uno de ellos apunta sobre él su revolver. El niño rie y tiende sus manecitas para coger el juguete, el artista aprieta de pronto el gatillo y le rompe la cabeza” Los hermanos Karamazov de Fiodor Dostoyevski.

“pienso, que tambien debemos esforzarnos por hacer del mundo el mejor lugar posible para otros, bien sea que signifique visitar a un amigo en el hospital, dar mas dinero a las organizaciones de beneficiencia locales o las iniciativas de ayuda internacionales, trabajar como voluntario..... Hemos de vivir la vida plenamente y ayudar a que otros tambien puedan disfrutar de los dones de la tierra.. Al final, quiza no tenga soluciones difinitivas para todos los problemas de la vida. Acaso no sepamos muchos porqués y paraqués. Pero simplemente porque no tengamos una solución al sufrimiento no significa que carezcamos de formas de responder a él. Nuestra respuesta debe ser trabajar por aliviar el sufrimiento siempre que nos sea posible y vivir la vida tan bien como podamos”

“No hay razón para buscar el sufrimiento, pero si éste llega y trata de meterse en tu vida, no temas, míralo a la cara y con la frente bien levantada” Friedrich Niezsche

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