Ir al contenido principal

Sentido y sensibilidad

Título original: Sense and sensibility 

Autor: Jane Austen

Traducción: Isabel Hernández

Editorial: Debolsillo

Año de publicación:  1811

Año de edición :2013

Número de páginas:369

Genero: Ficción, Novela, Clásica, Romance


Este es una de las otras obras que me he visto en releer, no porque haya algo especial en la misma, sino a modo de refrescar lo leído, y además, porque así me lo pide el camino que estoy trillando que aun falta mucho por recorrer. Y dentro de este camino no se escapaba Sentido y sensibilidad de la escritora Jane Austen. Una historia de dos hermanas jóvenes en un viaje personal de descubrimiento sexual y romántico. Hija de Henry Dashwood, quien en vida tuvo ligado a dos matrimonio, con la primera tuvo un hijo, John Dashwood, y con la segunda esposas a tres hijas: Elinor, Marianne y Margaret. Pero donde se centrara la novela es en las dos hermanas mayores, dos hermanas opuesta en caracteres, por un lado Elinor Dashwood es mas racional, es la encarnación del sentido, es reflexiva, reservada y practica, mientras que Marianne es romántica, espontanea, con una amor por la naturaleza, la sensibilidad excesiva. Es decir, nos encontramos ante dos temperamentos opuestos.


El caos llega cuando muere Henry Dashwoo, que de acuerdo a las costumbres y leyes británicas deja un sustancial patrimonio, pero cae en manos del hijo, dejando al segundo matrimonio prácticamente en la calle, pues pierden los privilegios y se ven obligada a vivir en la pobreza con pocos recursos. Todo esto hizo cambiar de domicilio e irse por una oferta dada por un primo lejano Sir John Middleton a la Señora Dashwood. Ya en Barton Park ubicada en Devonshire se dan todos los hechos mas importantes de la vida de los Dashwood, aunque Elinor no estaba de acuerdo con dejar atrás a Norland donde se había enamorado de Edward Ferrars, el cunado de su medio hermano. En este nuevo hogar se presenta el oficial retirado Coronel Brandon, que quedo asombrado con la belleza de Marianne de apenas diecisiete años, en cambio el era mucho mayor que ella, pero quien realidad la saca de casilla en los amoríos a Marianne es la presencia de joven John Willoughby, un tipo seductor y de una belleza varonil inigualables, pero así como entra es algo enigmático, en tiempos atrás abandona con un embarazo a Eliza William, y mas luego aparece, pero ahora la presa es Marianne, pero mas luego, después de formalizar algo entre ellos dos, el decide abandonarla, pues tiene que partir a Londres.  


Sra. Jennings organiza una estancia de invierno en su casa de Londres para Elinor y Marianne. Marianne sigue buscando a Willoughby y espera reunirse con él en Londres. El coronel Brandon visita y le dice a Elinor que la charla en la sociedad londinense es de un compromiso entre Marianne y Willoughby. Ya está muy claro que el coronel Brandon alberga sus propios sentimientos de profundo apego a Marianne. En una fiesta posterior en Londres Marianne ve a Willoughby, pero rechaza fríamente a Marianne y se reúne con sus propios amigos, incluida la señorita Sophia Grey. Al día siguiente llega una carta de Willoughby para Marianne, y en ella niega haber tenido sentimientos por ella. Poco después, se revela que Willoughby se casará pronto con Miss Grey. Es entonces cuando el coronel Brandon informa a Elinor de la historia de libertinaje de Willoughby, incluso con el propio barrio adoptivo de Brandon, Eliza.

 

No mucho después de esto, la hermana de Lucy, Anne, revela noticias del compromiso secreto de Lucy con Edward Ferrars. Indignada, la Sra. Ferrars deshereda a Edward, y promete que la fortuna familiar irá al hermano de Edward, Robert, en su lugar. Las hermanas Dashwood salen de Londres para visitar a amigos de la familia en Somerset, y es allí donde la todavía afligida Marianne desarrolla un resfriado severo que empeora y amenaza rápidamente su vida. El coronel Brandon, que había escoltado a las hermanas Dashwood a Somerset, se va para poder traer a la Sra. Dashwood de Devonshire a Somerset. Después de que Brandon se vaya, Willoughby llega buscando el perdón de Marianne. Elinor le niega ese privilegio, y Willoughby le hace una explicación de sus acciones. Elinor tiene una lástima de Willoughby, y se va a la noche. La fiebre de Marianne se rompe, y cuando la Sra. Dashwood y el coronel Brandon llegan a la mañana siguiente y se sienten aliviados al encontrar a Marianne comenzando a recuperarse.


Elinor más tarde le dice a Marianne de la visita de Willoughby, y Marianne se da cuenta plenamente de que nunca podría haber encontrado la felicidad con él. A medida que se hacen los preparativos para un regreso a Barton Park, Marianne comienza a apreciar al coronel Brandon y se encuentra cada vez más apegada a él. Brandon y Marianne pronto se comprometen para casarse.

Poco después del regreso a Barton, los Dashwood aprenden de un sirviente que Lucy Steele se ha casado con el Sr. Ferrars. Sin sorpresa por la noticia, sin embargo, están tristes de escucharla. Edward llega poco después y corrige un error: Lucy Steele se ha casado con el receptor de la fortuna familiar, el hermano menor, Robert. Edward confiesa que ha amado a Elinor y solo a Elinor desde su primera reunión en Norland y ahora finalmente es libre de proponerle matrimonio. Elinor acepta felizmente y la historia termina con una nota de alegría exclamada.


Con apenas 19 anos para una arracada en el mundo de las letras, no estuvo nada mal, pues las demás novelas le auguran éxitos. Esta joven pone en balance la dicotomía entre sentido y sensibilidad”. Una distinción simbolizada por el contraste psicológico entre dos de sus personajes principales. Si bien es cierto que son características psicológicas de los personajes, no siempre tiene pegado dichas características, porque aunque Elinor representa el sentido, no carece de pasión, y mientras Marianne representa la sensibilidad, no es siempre tonta y obstinada. Ambas logran la felicidad expresando sus sentimientos ya al final de la novela. Austen nos hace transitar en un equilibrio la razón y la pasión.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Carta de Manuela Sáenz a James Thorne, su primer marido

No, no y no, por el amor de Dios, basta. ¿Por qué te empeñas en que cambie de resolución. ¡Mil veces, no! Señor mío, eres excelente, eres inimitable. Pero, mi amigo, no eres grano de anís que te haya dejado por el general Bolívar; dejar a un marido sin tus méritos no seria nada. ¿Crees por un momento que, después de ser amada por este general durante años, de tener la seguridad de que poseo su corazón, voy a preferir ser la esposa del Padre, del Hijo o del Espíritu Santo o de los tres juntos? Sé muy bien que no puedo unirme a él por las leyes del honor, como tú las llamas, pero ¿crees que me siento menos honrada porque sea mi amante y no mi marido? No vivo para los prejuicios de la sociedad, que sólo fueron inventados para que nos atormentemos el uno al otro. Déjame en paz, mi querido inglés. Déjame en paz. Hagamos en cambio otra cosa. Nos casaremos cuando estemos en el cielo, pero en esta tierra ¡no! ¿Crees que la solución es mala? En nuestro hogar celestial, nuestr

La extraña muerte de Fray Pedro

En 1913, el nicarag ü ense Ruben Dario presenta este cuento, el cual relata la historia de un fraile que muere en nombre de la ciencia. Un ser pertubado por el maligno espiritu que infunde la ciencia, el cual fragmentaba sus horas coventuales entre ciencia y oracion, las disciplinas y el laboratorio que le era permitido. Con este texto, Ruben Dario, deja en claro que la fe es un acto de fidelidad, que se sobreentiende en el corazón sin pasar por la cabeza. “No pudo desde ese instante estar tranquilo, pues algo que era una ansia de su querer de creyente, aunque no viese lo sacrilegio que en ello se contenia, punzaba sus anhelos” Toda la historia tiene lugar en el cementerio de un convento, cuya visita va dirigida por un religioso. la guia advierte a sus seguidores sobre la lapida de Fray Pedro, personaje central del cuento. Un personaje “flaco, anguloso, palido” e incluso de espiritu perturbado cuya desgracia se veia venir con su sed de conocimiento. El fraile persuade a

Donna Tartt, el vuelo entre la alta y la baja literatura

Por su primer título,  El secreto  (1992), Donna Tartt  (Greenwood, Misisipí 1963) recibió un adelanto de 450.000 dólares (el equivalente sería hoy una cifra muy superior), caso insólito en alguien que no había publicado aún nada. Antes de salir el libro, un  extenso perfil aparecido en  Vanity Fair  predijo la fama de la autora, anunciando la irrupción en el panorama de las letras norteamericanas de una figura que supuestamente borraba la distancia entre la alta y la baja literatura. Confirmando las esperanzas puestas en ella por sus editores, “El secreto” vendió cinco millones de ejemplares en una treintena de idiomas. Las críticas fueron abrumadoramente favorables, aunque no hubo unanimidad con respecto al diagnóstico de  Vanity Fair.  La primera novela de Donna Tartt es un thriller  gótico que lleva a cabo con singular habilidad el desvelamiento de un misterioso asesinato perpetrado en el departamento de lenguas clásicas de Hampden College, institución universitaria de carácter