Título original: Lange Weile. Über das Warten
Autor: Andrea Köhler
Traducción: Cristiana García Ohlrich
Editorial: Asteroide
Año de publicación:2012
Año de edición :2018
Número de página:168
Genero: Nonfiction, Ensayos, filosofía
Detrás de las grandes oportunidades siempre se encuentran pintada la espera, y esa espera como momento del cual magnifica la navegabilidad del tiempo, es sin lugar a duda, atormentadora, tan desagradable, pero a la vez también positiva. Como bien nos dice Andrea Köhler, la espera se apaga. De todos modos, la pura espera sin distracciones navegando por el internet, chateando, jugando. Esta puede tener sus ventajas en el dentista. Pero los expertos advierten contra la perdida de cultura. ‟Nos imaginamos en el consultorio del médico, en las paradas de autobús y en los consultorios, la gente solía pasar algún tiempo esperando, esperando en el sentido de no hacer nada, solo observando, mirando a las gentes, creando mundos consigo mismo con lo que observamos”. Ya hoy en día, la espera es un concurso de quien aguanta más esas horas que nos torturan, a ingeniárnosla a ser el primero sin importar que otros están delante, porque ya no puedo esperar, porque no puedo ser como aquellas cartas que se enviaban de un lugar a otro, donde el receptor debía esperar pacientemente.
“La muerte nos hace humanos y solo hay espera si existe la muerte”
El tiempo regalado. Un ensayo sobre la espera de la escritora nacida en Sajonia, pero que vive entre Alemania y Nueva York, Andrea Köhler, es una apuesta de enrostrar la espera, la cual a nadie le gusta, porque la espera como estado en el tiempo contiene aliento para recordarnos la muerte pues “Podemos engañarnos repitiéndolo: vive el momento, pero en realidad se trata de memento mori (recuerda que vas a morir), y nada como la espera nos lo recuerda” Las esperas son inevitables y forman parte de nuestras vidas, esperamos que pase el dolor, esperamos a que nos atiendan, esperamos que alguien llegue, esperamos el autobús. Esperamos y esperamos, y no nos gusta nada porque ese tiempo suspendido nos recuerda lo efímero que es la vida.
Creo que un texto interesante, pero con cierto vicios de profundidad sobre el tema de la espera, creo que debió ahondar más del mismo. Hace uso de Nietzsche, Kafka, Proust, Barthes, Beckett, Nabokov o Borges para ir apoyando lo que nos quiere plantear. Este texto es una reflexión literaria-filosófica sobre la espera. “Si damos tiempo pasan cosas, llegan entonces lo inaudito, lo inexplicable” trenzada a partir de las lecturas de 42 libros, de los hermanos Grimm a Sloterdijk pasando por los picos de Beckett y su Esperando a Godot o del Heidegger de los conceptos fundamentales de la metafísica. Creo, que a partir de esto, y los usos para la sustentación en el ensayo, el texto es interesante, aunque hubiese querido que ahondara más el tema.
Comentarios