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El mejor libro del año según los lectores: ‘La verdad sobre el caso Harry Quebert’. Según lectores del Pais

He oído alguna vez que La verdad sobre el caso Harry Quebert, de Joël Dicker, es una novela mentirosa. Sería, dicen, una novela que triunfa engañando a sus lectores: en contra de las leyes de la ficción criminal, se le dan al lector pistas falsas para resolver el asesinato sobre el que se construye la historia. “No debe someterse al lector a otros subterfugios y engaños que los que urde el criminal contra el investigador”, dictaba el clásico S. S. Van Dine, aunque ni él mismo respetaba su regla en las aventuras del detective Philo Vance. Pero en La verdad sobre el caso Harry Quebert (Alfaguara) los personajes mienten o dicen lo que creen verdad y es mentira, porque las apariencias engañan. Y, si personajes que creíamos vivos están muertos, el narrador sabe lo mismo que sus lectores, nosotros. No ha querido embaucarnos. Como en toda novela de misterio, el criminal tiene la obligación de decir que no es un criminal, y el detective debe equivocarse muchas veces para no resolver el enigma hasta la última página, de modo que, para bien de sus lectores, la novela no se acabe al principio. Es lo que pide el público, entretenido, sobresaltado, desconcertado, mientras intenta descifrar la adivinanza, encantado por el juego de manos: ¿lo que parecía ser un héroe es un farsante? ¿El monstruo es un ángel, o es al revés? Supongo que esta novela sorprendería al propio Jöel Dicker según la iba escribiendo, según iba contando la historia de cómo un novelista, Markus Goldman, inventa la obra que creía no poder escribir.

El Pais

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