Ir al contenido principal

El terrorismo globalizado

La reciente aparición de su gran novela, La ofensa (2007), del escritor asturiano Ricardo Menéndez Salmón (Gijón, 1971), fue bastante sorprendente, aunque ya era previsible para quien conociera su obra anterior, bastante abundante -aunque reducida al ámbito regional-, lo que muestra que no se trataba de un recién nacido, caído del cielo, sin más. Pues sus principios fueron bastante trabajosos, y ya duraban casi más de diez años, cargados de libros, entre novelas, ensayos, teatro, poemas, y una larga serie de colaboraciones en revistas y periódicos regionales. Filósofo de formación, periodista, editor, cargado de premios y honores, sus principios fueron bastante trabajosos, antes de dar el salto a escala nacional con esta penúltima novela ya citada.

Menéndez Salmón es sobre todo filósofo, un hombre cargado de cultura y dotado de un estilo propio, expresionista, fuerte, de inspiración sobre todo germánica, trágico, pero que suele tropezar casi siempre con problemas para una solución narrativa eficaz. Por ello sus primeras novelas resultan fragmentarias, faltas de narratividad, con lo que brilla mucho más en los relatos cortos -Los caballos azules (2005), que fue lo primero que me llamó la atención de él- mientras sus novelas iniciales, La filosofía en invierno (1999), Panóptico (2001), Los arrebatados (2003) y La noche feroz (2006), no acaban de conseguir la fluidez narrativa necesaria.

Tras conseguir su obra maestra con La ofensa, donde la potencia metafórica suple con creces esa falta de narratividad, logrando una estructura narrativa total (trata de cómo la presencia del terror separa en el alma del héroe, un soldado alemán durante la II Guerra Mundial, la sensibilidad de la moralidad, ésa es la verdadera "ofensa"), ahora se inclina por otro también relacionado, el del terror, que la otorga una frase de Dostoievski, "el terror es la maldición del hombre" (en Los demonios) que coloca como lema de esta nueva novela, en la que sin embargo le perjudica su falta de ilación narrativa y resulta excesivamente fragmentada y hasta desarticulada.

En una ciudad del norte, denominada Promenadia, hay en asesino en serie, que suele dejar un zapato desparejado al lado de sus crímenes, es objeto de una persecución por parte de sus víctimas, de cinco policías, de tres enloquecidos, y de una serie de circunstancias, que suelen apuntar a su nombre real, Mortenblau, que es como se titula la primer parte de libro, que sigue con la exploración de la locura, 'El mundo bajo la caperuza de un loco' y cierra con una desarticulación familiar, 'Padres sin hijos', con rastros autobiográficos. La novela está muy desarticulada, pues se compone de fragmentos narrativos, por lo general escritos en presente, con una simultaneidad que interrumpe continuamente el hilo de la narración. Con lo que se comunica el terror pero se desarticula al mismo tiempo. Novela muy bien escrita, muy trágica, con evidente fuerza expresiva, pero que no alcanza la perfección de la anterior.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Grandes esperanzas (Fragmentos)

«En el primer momento no me fijé en todo esto, pero vi más de lo que podía suponer, y observé que todo aquello, que en otro tiempo debió de ser blanco, se veía amarillento. Observé que la novia que llevaba aquel traje se había marchitado como las flores y la misma ropa, y no le quedaba más brillo que el de sus ojos hundidos. Imaginé que en otro tiempo aquel vestido debió de ceñir el talle esbelto de una mujer joven, y que la figura sobre la que colgaba ahora había quedado reducida a piel y huesos. [...] ―¿Quién es? ―preguntó la dama que estaba sentada junto a la mesa. ―Pip, señora. ―¿Pip? ―El muchacho que ha traído hasta aquí Mr. Pumblechook, señora. He venido a jugar... ―Acércate más, muchacho. Deja que te vea bien. Al encontrarme delante de ella, rehuyendo su mirada, observé con detalle los objetos que nos rodeaban, y reparé en que tanto el reloj que había encima de la mesa como el de la pared estaban parados a las nueves menos veinte. ―Mírame ―me dijo miss...

Los primeros exámenes confirman que Pablo Neruda padecía un cáncer avanzado

La historia oficial señala que el premio Nobel de Literatura Pablo Neruda murió a las diez y media de la noche del 23 de septiembre de 1973 en la clínica Santa María, de Santiago de Chile, a causa de un cáncer de próstata. Sin embargo, Manuel del Carmen Araya Osorio, el chofer chileno que trabajó a su servicio durante sus últimos meses, declaró en 2011 que murió envenenado mediante una inyección letal que le aplicaron en el estómago durante su convalecencia en la clínica, 12 días después del golpe de Estado que perpetró Augusto Pinochet. Tras conocerse la declaración del chófer, el Partido Comunista de Chile presentó una querella para conocer la verdad sobre la muerte de quien tal vez fuera su militante más conocido. Finalmente, los restos del poeta fueron exhumados el lunes 8 de abril en el balneario de Isla Negra, a la orilla del Pacífico, a 100 kilómetros de Santiago de Chile. Ahora, los primeros exámenes radiológicos y de tejidos orgánicos entregados al juez Mar...

El murmullo de las abejas

Título original:  El murmullo de las abejas         Autor:  Sofía Segovia Editorial: Lumen Año de publicación:2015 Año de edición :2016 Número de página:496 Genero: Ficción, Literatura, Realismo mágico, Histórica, Novela   El libro El murmullo de las abejas, como su escritora, Sofía Segovia, me llega por recomendación del algunos lectores, pues me habían hablado de lo maravilloso del texto. Una novela con un matiz tierno que expone por medio del realismo mágico la historia familiar anclada en los ojos de un  niño   en el discurrir de los inicios de la revolución de 1910 en México, pero con la salvedad de que en si la novela no es una novela historia, sino que pone pinceladas de los hechos históricos que salpicaron a la terrateniente familia de los Morales en Linares, Monterrey y Florida.   Leer el Murmullo de las abejas es posibilitarnos a creer, que aquellos que es inconcebible en la realidad, en la novela todo ocurre como algo nor...